Pastelerías Martina de Zuricalday es tradición, es calidad, es historia, es parte de la villa de Bilbao, que con 193 años de historia se ha convertido en el comercio más antiguo de la capital vizcaína. No hay habitante de Bilbao ni turista que no se haya quedado mirando con asombro ante cualquiera de los escaparates de sus cuatro tiendas, que además están todas en el corazón de la ciudad.
Y es que qué escaparates. La que es además la pastelería artesanal más antigua de Euskadi y una de las primeras a nivel nacional, da sentido como nadie a la expresión “de Bilbao de toda la vida”, donde seis generaciones de pasteleros se han encargado durante casi dos siglos de poner su sello en miles de eventos y celebraciones de todo tipo.
Martina de Zuricalday, que conserva tanto su forma de trabajo tradicional como sus recetas maestras secretas escritas a puño y letra por la propia Martina, sigue elaborando estas por parte de personas de carne y hueso de su equipo cada día de forma manual en su obrador de Bilbao. Cada mañana eligen únicamente los mejores ingredientes naturales; amasando, horneando y decorando cada dulce uno a uno. A mano y a fuego lento, como lo han hecho siempre desde 1830. Y eso se nota.
Entre sus especialidades destacan el bollo de mantequilla, el pastel de arroz, la palmera de chocolate y la carolina en todos sus tamaños, la bomba y todo pastel o tarta que lleve su inigualable crema pastelera, así como sus irresistibles trufas. No hay que olvidarse tampoco de sus más de veinticinco variedades de pastas de té, el bizcocho noruego, el pastelito surtido o las tartas grandes y de ración -entre las que destaca una amplia variedad para todos los gustos y momentos-, destacando entre estas la inigualable y emblemática Tarta Espinaca, con la que seis generaciones de familias han celebrado cada Navidad como si fuera la primera.
Asimismo, Martina de Zuricalday incluye también entre sus productos postres y pasteles artesanales característicos de cada época distinta del año, entre los que destacan los pasteles típicos de San Blas, Pascua, Halloween, Carnaval o Navidad, los especiales de San Valentín o para los Días del Padre o de la Madre y todos ellos tienen un sabor irresistible.
En Navidad destacan su inigualable Roscón de Reyes, sus preciosas cestas de navidad elaboradas con sumo cariño por todo su equipo y sus turrones de Soconusco y Caracas, traídos y adaptados de las Américas en el siglo XIX por Martina de Zuricalday. Gracias a ella y a su turrón Soconusco, este es conocido como el turrón de Bilbao.
Mantener durante tantos años un equilibrio entre tradición, autenticidad y adaptación a la actualidad no ha sido tarea fácil; sin embargo, si algo caracteriza a Martina de Zuricalday es el cariño que le lleva poniendo tantos años a todo lo que hace y el respeto por el producto artesanal, que es lo que no ha variado ni variará y lo que hace de esta histórica pastelería una diferente y especial.
Un trabajo que no ha pasado desapercibido y que ha sido galardonado en distintas ocasiones, como con el Premio a la Tradición con Futuro en 2013 o el galardón como ilustres de Bilbao por parte del Ayuntamiento de la villa por haberla endulzado durante tantos años en 2015.
Los reconocimientos más recientes han tenido lugar en 2021 y 2022, con el premio a la Excelencia en gastronomía de Bizkaia y el reconocimiento como comercio centenario más longevo de la villa de Bilbao -también por parte del Ayuntamiento-, respectivamente.
Y es que Martina de Zuricalday se ha ganado a pulso cada reconocimiento, porque 193 años son muchos años y mantener esa ilusión por alegrar a otras personas es algo único. Ha resistido ante cualquier adversidad y ha alcanzado la excelencia por su trabajo incansable de cada día.
Casi dos siglos de un mismo proceso, que al fin y al cabo es la clave de su éxito. Una filosofía y una forma de hacer que es palpable nada más pisar cualquiera de sus tiendas y nada más probar cualquiera de sus productos. Estar presentes en muchos de los días más importantes de la vida de mucha gente no hace sino reforzar el tremendo orgullo que sienten de sus clientes, a quienes tratan siempre con el mejor cariño, honestidad y cercanía.
Información sobre la empresa:
MARTINA DE ZURICALDAY BILBAO, con obrador y cuatro establecimientos en el centro de la ciudad y casi 200 años de historia, es además de ser el comercio más longevo de la Villa de Bilbao, también la pastelería artesanal más antigua de Euskadi. Con seis generaciones de clientes, su nombre es sinónimo de tradición, calidad, distinción, meriendas con los abuelos, caras pegadas a sus escaparates y felicidad en las celebraciones.