
Uno de los exoesqueletos de Cyber Human Systems
El uso de exoesqueletos en distintas actividades cada vez está más generalizado y documentado. Un exoesqueleto se podría definir como un conjunto de piezas que cubre las extremidades u otras zonas de nuestro cuerpo, como el tórax, y que dispone de servomotores, sistemas hidráulicos o resortes de gas colocados en las articulaciones para inducir al movimiento o para detenerlo. Un exoesqueleto nos facilita llevar a cabo ciertas tareas que pueden ser costosas, como mover las extremidades, mantenerlas en una determinada posición durante horas sin notar cansancio (brazos en alto, por ejemplo) o levantar pesos fácilmente.
Los podemos encontrar en centros médicos orientados a la rehabilitación de pacientes con algún problema de movilidad o que necesiten un refuerzo lumbar o de la columna vertebral para poder moverse. También es conocido su uso por parte de algunos ejércitos como herramienta que permite al soldado sostener o alzar un peso considerable sin apenas esfuerzo. Por supuesto, desde hace años los exoesqueletos también han llegado a la industria manufacturera, especialmente al sector de la automoción, aunque también conocemos casos de éxito de su empleo en áreas de logística, en la construcción o incluso en agricultura para ayudar al trabajador en labores de recogida.
Dada la cada vez mayor demanda de este tipo de aparatos en la industria, ha nacido en Matiena (Bizkaia) la ‘startup’ Cyber Human Systems. Surge como una división de actividades de la firma Gogoa Mobility, que fabrica exoesqueletos para diferentes sectores como el médico, el industrial e, incluso, para el ocio. De cara a centrar sus productos para la industria y ante la gran demanda de empresas, especialmente del sector de la automoción, han decidido actualizar su catálogo de productos, como explica Carlos Fernández, CEO de Cyber Human Systems: “Teníamos un exoesqueleto activo con motores eléctricos, pero prácticamente todas las empresas nos dijeron que no querían motores con baterías porque, al final, era un lío el mantenimiento, recargar las baterías, eran equipos pesados. Entonces comenzamos el desarrollo de dos exoesqueletos diferentes”.
El primero de estos exoesqueletos está orientado al soporte de brazos alzados. “Fue una de las demandas principales, sobre todo por parte de Seat y de Gestamp. Está pensado para los operarios que tienen que rectificar los moldes y están con los brazos en alto durante largos periodo de tiempo llevando herramientas más o menos pesadas. Ya existían en el mercado exoesqueletos de ese tipo basados en muelles, que lo que hacen es empujar los brazos todo el rato hacia arriba. Nosotros cambiamos ese concepto. Desarrollamos un exoesqueleto que funciona como un ingrávido, es decir, tú paras en la posición que quieras y no te está empujando hacia arriba, sino que te mantiene los brazos en esa posición. Además, en su segunda generación es más ligero y está dotado de un visor de la fuerza con la que lo estás regulando”, recalca el CEO de Cyber Human Systems.
Una de las grandes ventajas de este exoesqueleto es que se puede llevar puesto con independencia de la actividad que lleves a cabo. Un operario puede estar 15 minutos trabajando con los brazos en alto, pero luego debe de agacharse a coger una pieza o desplazarse a otra zona y no puede quitarse y ponerse el exoesqueleto en todo momento. En este sentido, desde la ‘startup’ vizcaína prevén la pronta salida al mercado de un nuevo modelo de exoesqueleto de brazos regulable y desembragable: “Permite variar fácilmente la fuerza que está ejerciendo y en el momento en que no necesitas que te soporte los brazos, lo desconectas”.
Exoesqueleto de soporte lumbar
Otro de los desarrollos de Cyber Human Systems es un exoesqueleto de soporte lumbar orientado a servir de ayuda a la hora de levantar pesos o mantener la espalda en una determinada posición. “Se puede utilizar en áreas de logística cuando hay que subir cajas o levantarlas desde el suelo y también está indicado para gente que tiene que trabajar con la espalda un poco inclinada cargando la zona lumbar”, incide Carlos Fernández.
Otro de sus desarrollos recientes es Exosoft, un exoesqueleto lumbar construido con textiles inteligentes que ofrece soporte lumbar y de espalda para realizar tareas de todo tipo sin que incomode. “Lo puedes llevar todo el día puesto y, realmente, cuando te inclinas hacia adelante, te agachas o te doblas hacia un lado, te permite total libertad de movimientos y te soporta”.
Uno de los principales retos a los que se enfrentan las compañías fabricantes de exoesqueletos como Cyber Human Systems es captar el interés tanto de los responsables de empresas como de los propios trabajadores. En muchas ocasiones, los recelos de los gerentes se ven acompañados por la actitud de los empleados que creen que el uso de este tipo de dispositivos les va a obligar a multiplicar su productividad. “Algunos operarios rechazan su uso porque les obliga a realizar los movimientos de una determinada manera que, aunque es la más correcta, quizás no es la que acostumbren. Otros hacen una prueba de 10 minutos y lo descartan porque les estorba”, relata el responsable de la empresa.
Para acallar estas críticas, desde Cyber Human Systems en colaboración con Tecnalia, varias empresas y centros de investigación, y con la financiación de SPRI, están desarrollando un proyecto para la medición del impacto del uso de exoesqueletos en el ámbito industrial. Según Carlos Fernández, “en estos estudios estamos viendo reducciones de hasta el 30% o más en consumo energético. Estamos viendo reducciones de carga en soporte lumbar de un 45% dependiendo de las tareas. Al final, lo que hemos visto también es que estos datos se refieren a un uso continuado. No vale con que digas que te lo pones 10 minutos. Lo tienes que utilizar durante un tiempo porque es el viernes, cuando te vas a casa, cuando realmente ves el beneficio del uso de un exoesqueleto de este tipo”.